“Nunca una noche ha vencido al
amanecer,
y nunca un problema ha vencido a la esperanza”
(Bern Williams)
|
Tengo un amigo íntimo al que la
crisis ha golpeado de manera extrema. Me ha dicho que su situación económica –como
la de tantos españoles- ha ido deteriorándose progresivamente en los últimos
seis años. Dice, que ha llorado muchísimo, que han sido años de gran
sufrimiento, de insomnios constantes. Pero me cuenta que, ahora, precisamente cuando su
situación económica está peor y ha alcanzado el punto más grave de los últimos
años, cuando ha acumulado deudas y cuando hay días que apenas lleva un
euro en sus bolsillos, resulta que es el momento en el que encuentra más paz
interior, en el que más tranquilo está, en el que ve todo con mucha claridad,
en el que advierte un futuro limpio. Me ha dicho, también, que está muy satisfecho
de sí mismo por haber impregnado de dignidad personal y profesional todas las acciones
tomadas en este severo tiempo. Dice, mi amigo, que ha tenido
momentos en los que hubiera tirado la toalla, cortado la esperanza, quebrado los
sueños. Pero que él estaba convencido, en el fondo, de que esa no era la
solución. Que debía buscar las pocas fuerzas que le quedaban y enfrentarlas,
plantarle cara al presente con firmeza, confiar en sus posibilidades, encajar
los golpes y restañar rápidamente las heridas.
“La felicidad puede hallarse hasta en los momentos
más oscuros, si somos capaces de usar bien la luz”
(Albus
Dumbledore)
|
¡Claro!, yo, me quedo sorprendido
y le pregunto que cómo es eso posible, si es justo ahora cuando peor
debería encontrarse, con una mayor incertidumbre y él, me para, me interrumpe y
me dice “no, no, no..., qué va, qué va...,
todo lo contrario, ahora estoy más fuerte mentalmente, con más seguridad en mí
mismo, no tengo miedo a nada y me enfrento a la realidad de cada día con
optimismo e ilusión”.
“Mi amigo dice que el
fin de la pesadilla económica, está cerca”
Mi amigo, que es un hombre
bastante preparado, trabajador, emprendedor, transparente, cercano, con sus
defectos –por supuesto, como todos tenemos, seguro que yo tengo más que él-, creo
que lleva mucha razón en lo que dice. Hay que relativizar la situación. A veces, nos sentimos los más torpes del
país, los últimos de la lista del paro, incluso llegamos a dudar de nuestra
cualificación profesional. Y no, la verdad es que no vamos a ser los últimos en
encontrar un empleo digno. La vida, como la Naturaleza, es cíclica. Y mi amigo
ya está empezando a vislumbrar un nuevo amanecer.
“He aprendido mucho con
esta lección de vida. Me alegro por él”
Mi amigo dice que está profundamente
agradecido a su mujer. Que gracias al trabajo de ella han podido atender las
necesidades más elementales de su casa y que se ha sentido –se siente- fenomenalmente
atendido y ayudado por ella. Además, que desde que se normalice su situación
económica quiere pagar todo el dinero que le han prestado para, inmediatamente
después, poder volver a invitar a su mujer y a sus hijos, a su familia y a sus
amigos, a los que han podido ayudarle y a los que no, a comer o a cenar a un
buen restaurante cada vez que les apetezca, que empezará a ir de nuevo a los
estrenos cinematográficos de la semana, que viajará a ver a su familia, que está
deseando poder irse de vacaciones una semana y, sobre todo, me lo repitió varias
veces, que lo que más quería era agradecer uno a uno a todos los que le han apoyado
económica y psicológicamente. Que está deseando recuperar su equilibrio vital.
“¡Levántate, ponte los tacones…,
y pisotea las tristezas!” (Anónimo)
|
Mi amigo, me cuenta todo esto
porque ahora está más feliz y porque tiene mucha confianza en mí. Y me alegra
ver cómo ensalza los valores humanos, cómo vence el poder de la razón al efímero dinero, cómo sobresale
el conocimiento y se abre camino por encima de los medios económicos, cómo la
amistad, el amor, el respeto y el cariño son capaces de suplir sobradamente la falta de bienes
materiales.
¡Uy!, que casi se me olvida. Me dijo mi amigo que le hiciera el favor de dedicar esta publicación a su mujer y a sus hijos.
Por
supuesto, para ellos, con todo su amor (y el mío).
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu comentario.