Los rótulos que son
responsabilidad de empresas o instituciones públicas de Santa Cruz de Tenerife,
no respetan las normas ortográficas. Los responsables de encargarlos, y de
autorizar su posterior colocación, deberían saber que la acentuación gráfica de
las letras mayúsculas no es algo opcional, sino obligatorio, y que afecta a
cualquier tipo de texto.
Hoy, en apenas un recorrido de 15
minutos caminando por mi ciudad (Santa Cruz de Tenerife), el aburrimiento
estival me ha dado por mirar las placas de los nombres de las calles por las
que he ido pasando. De pronto, observo que existe un número altísimo de faltas
de acentuación. En las dos o tres primeras incorrecciones pensé... “bueno, un olvido lo tiene cualquiera”,
pero al comprobar la reiteración de la ausencia de tildes, entonces supe que no
era un hecho aislado, sino un error permanente. Habrá quien opine que eso no es
para darle importancia y que, si se entiende, es suficiente, sí, lo sé. Pero es
que esa excusa es el principio de la ignorancia. La buena ortografía enriquece
nuestra cultura. Debemos defenderla incondicionalmente.
Estaremos de acuerdo, al menos, en que el lenguaje escrito es
parte de un sistema social normalizado que debemos respetar todos, más aún
cuando lo ejerce una institución pública.
Pero, pensemos en positivo, ¿cómo
se pueden solventar estas anomalías ortográficas? Existen diversas opciones, la
visualmente más correcta sería la de cambiar una a una cada placa mal escrita,
si bien es verdad que el momento de crisis económica que vivimos no parece
aconsejar esta solución como la más adecuada. Aunque se me ocurre alguna medida
más. La más barata y eficaz, sin duda, es organizar por turnos y zonas a los
asesores -expertos en gramática y ortografía- del ayuntamiento capitalino,
apoyados logísticamente por los del cabildo de la Isla y los del gobierno autonómico.
Se formarían cuadrillas de corrección ortográfica, equipadas debidamente con los
reglamentarios monos de trabajo rotulados en la espalda con el lema “SANTA
CRUZ, SÍ ACENTÚA”.
¡Ah!, y perfectamente
pertrechados cada uno de ellos con su cubito lleno de pintura blanca, su
brochita y su escalera. La crisis no saben neutralizarla; la sanidad, la
educación o el paro, sigue siendo un problema sin solución para ellos, pero
estoy convencido de que un pequeño “brochacito”
sobre la letra correspondiente, fijándose bien en una plantilla previa, sí son
capaces de hacerlo. Y para aquellos que mantienen la
leyenda urbana de que “antiguamente las
mayúsculas no se acentuaban”, les dejo a continuación –y es copia literal
del texto- lo que al respecto afirma la RAE (Real Academia Española): Las letras mayúsculas deben escribirse con tilde, si les corresponde llevarla,
según las reglas de acentuación gráfica del español, tanto si se trata de palabras
escritas en su totalidad con mayúsculas como si se trata únicamente de la
mayúscula inicial. La Real Academia
Española nunca ha establecido una norma en sentido contrario”.
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por tu comentario.